Cuando pensamos en una habitación infantil, imaginamos madera, papeles pintados imposibles, muebles funcionales, buen almacenaje y, por supuesto, animales. Muchos animales.
Esta cabeza de llama de fieltro confeccionada a mano y, por tanto, única, nos parece una forma original y divertida de decorar el cuarto de los niños. Sirve de punto focal en torno al cual atrezar una pared. ¿Y quién no va a querer tener un amigo blandito siempre en la pared?
La llama está elaborada a mano con fieltro de lana y rellena de poliéster. Mide aproximadamente 37 x 17 x 22 cm .